Si encuentro cabrales auténtico hago las croquetas con cabrales, pero cuando no lo consigo uso una crema de queso cabrales que se vende en grandes almacenes y también quedan estupendas.
NECESITAMOS:
5 cucharadas de aceite
1 litro de leche aproximadamente
4 cucharadas de harina
100 gr de queso cabrales
ELABORACIÓN:
En una sartén antiadherente ponemos a calentar el aceite a fuego medio-alto y echamos la harina. La tostamos y añadimos poco a poco la leche (sin dejar de remover).
Cuando hayamos puesto la mitad de la leche le ponemos el queso de cabrales. Removemos bien para deshacer el queso y que no haya grumos. Si vemos que no nos queda suficientemente fina la masa, podemos meter la batidora en la misma sartén y quitar los grumos con una pasada de batidora, así de fácil. Seguimos removiendo y añadiendo la leche restante. Cocinar durante al menos 30 minutos, o hasta que la masa empiece a despegarse de la sartén.
Cuando ya esté lista la extendemos en una bandeja de loza o cristal y la dejamos enfriar (para que no se forme una capa dura al enfriarse yo le pongo inmediatamente film transparente bien pegadito a la masa).
Cuando esté fría liamos las croquetas haciendo bolitas (si se nos pega la masa a las manos nos las humedecemos con agua de vez en cuando), y las pasamos por huevo y pan rallado.
Se fríen en abundante aceite caliente, las ponemos sobre papel absorbente, de aquí a una bandeja y listas para comer cuando se enfríen un poquito…
¡QUE APROVECHE!